Los nervios durante el partido han tenido consecuencias
LanzaroteDeportiva.com
Como ya habíamos comentado en la crónica del encuentro entre La Tiñosa y el Costa Mogán perteneciente a la Segunda División B de Fútbol Sala, tras las tanganas montadas en la fase final del mismo y una vez acabado, se aventuraban que las sanciones de la Real Federación Española de Fútbol podrían ser bastante duras.
También como bien dejamos ver en el artículo publicado, ni culpamos a unos ni culpamos a otros. Es más, todos pusieron de su parte para que el partido acabara como lo hizo y aunque las sanciones han sido fuertes para lo que se acostumbra a ver en la competición, se podría incluso pensar que podría haber sido mayor por la cantidad de personas que participaron en el feo espectáculo.
Así el juez único de competición de la Real Federación Española de Fútbol decidió este miércoles una sanción de tres encuentros al jugador talaverano de La Tiñosa Tiguafaya, Mario Cerro, por el artículo 137.2e bajo el que se considera falta leve el intento de agresión como indicaron en el acta los colegiados del partido. También ha sido sancionado, bajo el mismo artículo el segundo entrenador del equipo local, Chichel Sánchez, por la misma causa que su jugador.
Por parte del Costa Mogán y tras el acta del partido, las sanciones fueron más duras, con 5 encuentros para varios jugadores al aplicarles el artículo 137.3b en el que se consideran faltas graves todas aquellas agresiones a cualquier jugador, técnico auxiliar o integrante de club. Bajo esta decisión han quedado Jonathan Martel, Heriberto Méndez y Rodrigo Trautmann, que se perderán 5 encuentros de liga.
A parte de estas sanciones, el juez único de competición decidió imponer una sanción económica de 1000 euros a La Tiñosa Tiguafaya amparándose en el artículo 139.3b en el que se dice que “tendrán asimismo la consideración de faltas graves y se sancionarán con multa de hasta 3.000 euros, pudiéndose apercibir de clausura, total o parcial, del terreno de juego e incluso acordar ésta por un período de uno a tres encuentros o hasta dos meses, y sin perjuicio de las indemnizaciones que procedan las actitudes violentas o agresiones que por parte del público se produzcan contra jugadores, entrenadores, delegados, integrantes de club, el equipo arbitral, directivos, dirigentes y otras autoridades deportivas, y contra sus bienes, antes, durante o después del encuentro y dentro o fuera del recinto deportivo”. Así, bajo este artículo el club ha sido multado con 1000 euros y el apercibimiento de la clausura del terreno de juego.
Estas sanciones impuestas por la Real Federación Española de Fútbol esta semana son las mayores de la última jornada y aunque no hubiera sido descabellado pensar en sanciones mayores e incluso a más personas, esperamos que por el bien del fútbol sala no se vuelvan a repetir.