Cuadro de honor de la primera edición del Lanzarote Open Pádel
LanzaroteDeportiva.com
El Lanzarote Open de A1Padel ha reafirmado a la isla como sede ideal para competiciones de nivel internacional, promoviendo el turismo deportivo. La pareja argentina, Leonel “Tolito” Aguirre y Gonza Alfonso, se consagró campeona en una final que destacó por su alto nivel competitivo y el entusiasmo del público.
El Lanzarote Open de A1Padel culminó este fin de semana con una espectacular final que coronó a Leonel “Tolito” Aguirre y Gonza Alfonso, quienes se impusieron en tres sets a Dani Martínez y Leito Yob. La final, celebrada en un ambiente de entusiasmo y con un público que llenó las instalaciones de Marina Lanzarote, fue el broche de oro de una semana de encuentros intensos y de alto nivel.
Durante la ceremonia de clausura, Juan Monzón, consejero de Deportes del Cabildo de Lanzarote, destacó la importancia de este tipo de eventos para la isla. “La celebración de una final como esta aquí en Lanzarote contribuye a posicionar a nuestra isla como un destino atractivo y versátil, capaz de albergar eventos de alta exigencia en un entorno único,” expresó Monzón, subrayando el impacto positivo que el torneo genera para el turismo y la economía local.
Añadió además que “la celebración de este torneo es el arranque definitivo de un proyecto que se está consolidando para que Lanzarote forme parte del circuito internacional de A1 Pádel,” impulsando así la relevancia de la isla en el mapa del deporte internacional.
La final fue intensa desde el primer momento. En un inicio sorprendente, Martínez y Yob se llevaron el primer set por 6/2, creando gran expectativa entre los asistentes. Sin embargo, Aguirre y Alfonso supieron mantener la calma y adaptarse, logrando remontar con un ajustado 7/5 en el segundo set para luego desplegar su mejor juego en el tercero. Con un marcador final de 6/1 en el set decisivo, la dupla argentina dejó claro por qué son los número uno de A1Padel, consolidando su noveno título de la temporada.
Este Lanzarote Open se despide dejando huella, no solo por la calidad del espectáculo, sino también por su contribución al posicionamiento de Lanzarote en el panorama de los grandes eventos deportivos internacionales. El éxito de esta edición sienta un precedente sólido para futuros torneos, reafirmando a la isla como un referente de primer nivel en el deporte y el turismo.